En Mercatitlán jamás pedimos un CV para contratar, creo que no hay nada como las entrevistas cara a cara, las pruebas técnicas y pasantías (pagadas obviamente, tampoco sean así con el nuevo talento). Y aunque me encantaría que más empresas tuvieran ese enfoque, sé que la mayoría de las contrataciones no se hacen de esta forma.

Seas freelancer, tengas una agencia de marketing o simplemente quieres conseguir un mejor trabajo para abandonar a tu jefe tóxico, en algún punto te pedirán tu Currículum o un Portafolio para saber si eres el mero mero 😎. 

Por lo que solo por hoy me pondré mi disfraz de gerente de recursos humanos (metafóricamente, no pensaste que me pondría una corbata fea, Axe Chocolate, y medio litro de gel ¿o sí?) para decirte los puntos por los que yo contrataría (o no) a alguien basado en su CV o Portafolio.

Personalización

Investiga hasta el cansancio la empresa a la que vas a enviar tu portafolio, consume su contenido en redes, checa sus anuncios, entiende su diferenciador etc. etc. Imagínate que mañana te contratan para ser el CEO y debes saber tanto de ellos como te sabes todos los diálogos de las pelis de Disney.

Eso solo es el paso uno, lo realmente importante es que uses esa información para personalizar tu portafolio destacando los proyectos que más se alinean a los objetivos del negocio, es un error terrible mandar el mismo PDF a un montón de empresas sin ningún criterio, entiendo que chance quieres abarcar mucho terreno en poco tiempo, pero si tú no te tomas ni 30 minutos por ellos ¿por qué ellos si deberían tomarte en cuenta? Envía un CV personalizado a cada empresa o a cada puesto al que apliques 📩.

Originalidad + Valor

Hace tiempo vi un post en LinkedIn sobre una chica que postuló para copywriter haciendo un poema y la contrataron al instante, hay quienes ponen bromas dentro de su CV, hacen un sitio web para presentarse o cosas del estilo. Incluso un día yo contraté a alguien que hizo un filtro de Mercatitlán en Instagram y lo publicó para que lo viera. En el mundo del marketing digital esto es mucho más común que en otras industrias y a mí me gusta, pero con una condición: debes dar valor.

Si en la sección de habilidades de tu CV solo pones “Soy Géminis”, no estás aportando nada. Si pones “Trabajé con las empresas A,B, y C elevando sus ventas un 60%... ah y soy Géminis” tienes más probabilidades de que tu originalidad o jiribilla sea bien vista (aunque nada lo garantiza).

El poema que te mencioné no hablaba de su primer amor, mencionaba todos los cargos y empresas en las que trabajó la chica, el valor siempre va primero. 

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No trabajas solo

Es muy común que en el afán de destacar te sientas tentado a adjudicarte el trabajo de todo un equipo. Por ejemplo poner en tu portafolio: Estrategia de marketing para Avengers Endgame en México. Sin embargo, realmente solo diseñaste un poster para Cinepolis y otras 50 personas en conjunto si hicieron el marketing de la película.

Este es un ejemplo exagerado, pero no importa a que escala sea, si te descubren (lo que es muy probable) quedas como un mentiroso 🤥 y adiós a tu chance de ser el elegido.

Si tú hiciste un poster, pon que hiciste un poster... no toda la estrategia de la película.

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Nada supera a los resultados

La neta la neta el 90% de los negocios al contratar a alguien solo se están cuestionando si esa persona o agencia les conseguirá más clientes, ahorrará tiempo, o bajará costos. Así que los proyectos de tu portafolio deben destacar esas métricas.

Está cool si aumentaste los likes en una fan page, pero mejor destaca cuántas ventas conseguiste, o deja de presumir tus costos por clic en campañas (métrica que le encanta presumir a los marketers como si la gente viviera de clics) y coloca testimonios de tus últimos clientes o jefes que hablan maravillas de tus resultados (puedes pedirles que te los dejen en LinkedIn para darles más credibilidad 👍).

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Apláudete solito

Fuera de tu portafolio o tu CV es importante que de vez en cuando publiques en tu Facebook, Instagram o la red que más uses algunos de los logros o cosas cool que haces en tu trabajo, por ejemplo: cuando tomaste un curso, terminaste un proyecto increíble o trabajaste con una empresa muy picuda.

Si tú no te aplaudes tus logros nadie lo hará (bueno tu mamá y tu tía, pero ellas no valen), hacerlo tiene dos beneficios: En primera tus amigos y familiares se mantienen al tanto de lo que haces y podrían recomendarte con alguien, pero aún más importante porque cada vez es más común que antes de contratarte te stalkeen (hay empresas en las que hasta es obligatorio que además de tu CV mandes el link a tus redes) y que mejor que se encuentren todos tus logros laborales y no solo las indirectas a tu ex.

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Marca personal

El punto anterior solo se refiere a posts casuales, pero podrías llevarlo al siguiente nivel y crearte una marca personal en YouTube, alguna red social o un blog (no es a fuerza, pero sí ayuda). Así no solo demuestras que sabes de lo que hablas sino que te pondrás frente a muchas otras personas que van a querer contratarte. Si ya te la pasas escribiendo biblias en WhatsApp o con notas de voz del tamaño de un podcast 🎙 mejor genera algo que podría darte la oportunidad de tus sueños. 

Si tuviera que resumirte este blog en dos puntos serían:

• Piensa en lo que valora la otra parte y entrégaselo
• Menos choros sobre cómo te consideras y mucha más carnita en lo que has hecho y tus resultados.